martes, 7 de diciembre de 2010
sábado, 4 de diciembre de 2010
SEÑALES DE VIDA
24684/10 es un expediente desaparecido desde el día 25 de noviembre de 2010. La última vez que se lo vio, vestía un pedido de ayuda económica para realizar un concurso literario. Los testigos que lo vieron por última vez aseguran haberlo encontrado de buen humor, saludable, entusiasmado, optimista a pesar de no tener ni un peso para pagar sus innumerables deudas. 24684/10 tenía buenas intenciones y su causa, además de justa, era entretenida. Existen diversas sospechas acerca de su paradero. Los especialistas no descartan ninguna hipótesis y, a medida que pasa el tiempo, surgen pistas que conducen a otras direcciones. Una de ellas, la que más aceptación tiene entre los especialistas, lleva a imaginar que 24684/10 fue interceptado por un grupo de bandoleros y asaltacaminos que suelen robar ideas ajenas y patentarlas como propias. Se los distingue por el color de sus atuendos, un gracioso arco iris que va del verde al morado. Desde luego algunos parecen camaleones y se recomienda a la población en general andar con precaución, sobre todo en las inmediaciones electorales donde la piel suele mudarse con la facilidad de un calzoncillo o una bombacha. Continuemos con la siguiente hipótesis, algo más increíble que la anterior. Un transeúnte informó al 0800-YO NO FUI que había encontrado restos de papel picado en la vereda de Alvarado 551, sede de Archivos Generales de una prestigiosa institución regional. De inmediato se hicieron presentes en el lugar los peritos del caso. Sometieron las evidencias a pruebas de compatibilidad de tinta pero los resultados no fueron concluyentes. Mientras tanto, en el barrio creen que lo tienen encerrado en el mencionado edificio, donde solo Dios sabe lo que le espera, de todas maneras hay quienes piensan que “algo habrá dicho”. Los periodistas que cubren esta noticia no pudieron obtener acceso a ese recinto. Las únicas descripciones que se tenían hasta hace unos días provenían de fuentes confidenciales. Contaban que se trataba de un edificio añoso, oscuro en su gran mayoría, con manchas de humedad en donde pegaba la luz. Las arañas eran sus habituales inquilinas, aunque también había ratas y cucarachas. Muchas de ellas ya se habrían adaptado de tal forma a la vida administrativa que usarían traje y corbata. Sin embargo, en el día de ayer salió al aire una cámara oculta hecha por AM 048 Radio Silencio, en frecuencia reducida. Como era de esperar el impacto de las imágenes fue más que estremecedor, más que espeluznante, más aterrador que despertarse a medianoche y ver a tu mujer con ruleros, los técnicos de sonido se arrancaban los ojos para no ver, las madres tapaban los oídos de sus niños. Miles y miles de hojas apiladas, montañas de papel podrido, palabras inútiles porque esperan llegar a destino sin saber que ya están muertas, trámites movidos de lugar por fantasmas. Fantasmas por acá, por allá, sombras que andan penando en los pasillos, chocándose, murmurando explicaciones sin sentido, corriendo solícitos a excusarse por la tardanza de aquello que no habrá de llegar sino cuando sea tarde. De hecho siempre se hace tarde en estos edificios, como si el sol no quisiera prestarles ni una sola tajada de luz. Y ahí, en aquel cementerio de expedientes, de ideas que alguna vez fueron frescas, cabía la posibilidad de encontrar a 24684/10. Los empleados de Archivos Generales admiten, sin embargo, que, de haber sucedido lo peor, existen fuerzas sobrehumanas capaces de “resucitar cualquier tipo de trámite”. Directamente desde las alturas de Machu Pichu, llega el maestro de lo oculto, el chamán de la intemperie, el único que tiene pacto con el diablo, vidente y conocedor de los pasillos del inframundo, el infalible Profalsor Gre Gre, “nada es imposible para él, atrae a la oposición más recalcitrante por más difícil que parezca, expulsa espíritus de disenso, promete y cumple su palabra” (valor de la consulta: $500). Otra línea de investigación sugiere que 24684/10 huyó a un spa en las termas de Rosario de la Frontera, marchito después de no haber ganado los Juegos Florales y mareado de tanta vuelta burocrática. Mariano Ovejero, actual Secretario de Turismo, quien no tiene nada que ver en el asunto, se abstuvo de emitir opiniones, entre otros motivos adujo que padecía de lengua mota y que, en realidad, en ese momento el titiritero había salido a hacer realidad la esperanza. Mientras tanto 24684/10 sigue sin ser encontrado. Sus familiares y amigos aún exigen su aparición con vida.
*NOTA: Este cuento no participó de ningún III Concurso literario para estudiantes “Alicia Chibán”.
CUALQUIER SEMEJANZA CON LA REALIDAD ES PURA COINCIDENCIA
viernes, 3 de diciembre de 2010
Censura y manejo discrecional de fondos en la UNSa:
“el increíble caso” del Concurso Literario “Prof. Alicia Chibán”
La Secretaría de Letras del CUEH ya lanzó el tercer Concurso Literario para estudiantes de la UNSa “Profesora Alicia Chibán”. Los carteles que lo anuncian están en todas las Facultades, pagados con nuestros fondos, con la promesa verbal del Secretario General de la Universidad de que contaríamos, con seguridad, con ese dinero otorgado por Rectorado para cubrir todos los gastos de difusión ($500). Pero nuevamente nos topamos con trabas puestas por las autoridades de la Universidad. ¿Qué pasó ahora? ¿Son los engorrosos laberintos burocráticos, con las que nos encontramos siempre, los que dificultan desarrollar esta actividad de estudiantes y para estudiantes? No. Escribimos esta nota por la gravedad de la situación que se nos planteó el pasado miércoles, 2 de diciembre.
Como todos los años, presentamos tanto en la Facultad de Humanidades como en Rectorado el pedido de aval académico y apoyo económico para poder desarrollar esta actividad cultural de sumo interés para toda la comunidad estudiantil de la UNSa. La Facultad nos cubrió la plata para el primer premio y Rectorado, a través del Secretario General, el Ingeniero Falú, nos prometió otorgar los $500 (quiniento pesos) para la difusión (la propuesta inicial del proyecto para este año incluía un segundo premio, de $500, que iba a ser para poder ampliar la convocatoria a la Universidad Nacional de Jujuy, pero esto se nos denegó). Obviamente, no nos salvaríamos de la burocracia, el expediente 24684/10 paseó por oficinas, luego, la actividad logró tener el aval académico, pero el apoyo económico todavía no está. ¿A qué se debe esto? Después de que el expediente se perdió en archivos generales, fue rescatado nuevamente; pero el 25 de noviembre fue enviado por segunda vez a los archivos, pero ahora con la resolución de que no se nos daría el apoyo económico.
El lector se pregutará cómo puede haber sucedido esto, si ya teníamos la palabra para obtener la ayuda económica y si, además, académicamente, la actividad estaba avalada por la misma universidad. La respuesta es tan sencilla como increíble. Todo un Palo ganó el 11 de noviembre por tercera vez consecutiva la conducción del CUEH. Como dijo el actual presidente del mismo, Elvio Reartes, en una nota publicada: “La victoria de Todo un Palo es un golpe fenomenal a las camarillas privatistas que dirigen la Universidad y la Facultad” ¿Tiene esto alguna relación con la posibilidad o no de dar apoyo económico a nuestro concurso? Para las autoridades de la universidad, sí. Emitir esta opinión política significó para ellos imposiblitarnos el concurso literario; la única razón: Todo un Palo criticó la política y la forma de actuar de la conducción de la universidad. Esto es digno de una ficción literaria, pero lamentablemente, es realidad. Tener una idea política distinta, opuesta a la conducción, significa impedirnos desarrollar cualquier actividad, pues se nos niega la ayuda económica por parte de la institución.
Esto es una forma encubieta de extorsión: si ustedes publican algo en contra nuestro, no pueden usar los fondos de la universidad pública que nosotros manejamos. ¿No es ésta la forma de actuar de una camarilla? Entendemos que este hecho demuestra un manejo discrecional de los fondos públicos. Hablando sobre el tema con el Ingeniero Falú, no nos lo ha desmentido. No es la primera vez que a Todo un Palo se le negó apoyo a sus actividades por su inclinación política. Con el pedido para el concurso literario, esta censura fue descaradamente frontal.
Después de que denunciáramos oralmente a Falú esta forma de actuar de la conducción de la UNSa y que nuestro expediente iba a quedar archivado, el ingeniero se manifestó como el salvador de los expedientes muertos y ¡oh sorpresa! expresó que tiene el poder para “resucitarlos”. Si nuestro expediente resucita entre los muertos (¿será al tercer día?), no va a ser por el poder del rectorado, sino por nuestro accionar.
La gravedad de este hecho puntual es que por una opinión política se censuran actividades, sean del tipo que fueren, y esto es inadmisible, más aún, en una universidad pública.
Miryam M. Pagano